SIRIA. — La ofensiva yihadista lanzada la semana pasada desde la provincia de Idlib por una coalición islamista liderada por la organización terrorista Hayat Tahrir al Sham ha desencadenado la mayor escalada de la guerra civil en Siria desde 2019.
El Ejército Árabe Sirio ha tenido que retirarse de algunas ciudades clave, como Alepo y Hama, a pesar de haber atacado, en colaboración con las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia, a grupos armados yihadistas, eliminando a centenares de milicianos y destruyendo decenas de unidades de material bélico.
El ministro sirio de Defensa, el general Ali Mahmoud Abbas, admitió el pasado 5 de diciembre que el Ejército tuvo que retirarse de Hama para preservar las vidas civiles y que las organizaciones terroristas controlan partes de la localidad y de la gobernación homónima. Sin embargo, las tropas sirias aún están presentes en las afueras de esa localidad y se encuentran plenamente preparadas y dispuestas para actuar, recoge el sitio web Sada El Balad.
Según el alto responsable militar, el Ejército está librando una batalla feroz y continua contra las organizaciones terroristas más poderosas, que utilizan tácticas de guerra de guerrillas, lo que obliga a los militares a recurrir a métodos apropiados, incluyendo el de «avance y retirada».
«Estamos en una buena posición sobre el terreno y nuestras Fuerzas Armadas han trabajado para redesplegarse a fin de preservar vidas», afirmó Abbas, que explicó que las tácticas de batalla requieren a veces de un repliegue.
Mientras varios medios informaban de duros combates entre las fuerzas sirias y terroristas en las provincias de Hama y Homs, el ministro de Defensa de Siria pidió el viernes a su pueblo firmeza y confianza en el Ejército.
El Ministerio de Defensa también desmintió informaciones mediáticas sobre la retirada de sus tropas de la ciudad de Homs y sus alrededores y aseguró que las Fuerzas Armadas son capaces de repeler cualquier ataque terrorista.
Ayuda militar de Rusia
Las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia han estado desplegadas en el país, con sede en la base aérea de Jmeimim (Latakia), desde 2015, después de que fueran invitadas por el presidente Bashar al Assad para colaborar en la lucha contra la organización terrorista Estado Islámico.
Aviones rusos están proporcionando fuerte apoyo a las fuerzas gubernamentales sirias, realizando ataques contra grupos armados de terroristas desde el aire. Así, el Centro ruso para la reconciliación de las partes enfrentadas en la República Árabe Siria comunicó este viernes, 6 de diciembre, que «en las últimas 24 horas, aviones de las Fuerzas Aeroespaciales rusas y de la Fuerza Aérea siria llevaron a cabo ataques con misiles y bombas contra lugares de concentración de extremistas y depósitos de municiones en las provincias de Idlib, Hama y Alepo».
«Fueron destruidos hasta 200 terroristas, 15 vehículos blindados de combate, dos lanzacohetes, dos morteros, 43 autos, nueve motocicletas, 15 vehículos aéreos no tripulados, dos puntos de mando y control y siete depósitos de material bélico», informó el director adjunto del centro, Oleg Ignasiuk.
Asimismo, Rusia cuenta con una base naval en el puerto de Tartús, también en la gobernación de Latakia, que opera bajo un acuerdo de arrendamiento por 49 años firmado con el Gobierno sirio en 2017
Formaciones kurdas
Un grupo de combatientes kurdos sirios ha tomado este viernes la principal ciudad del este del país árabe, Deir ez Zor, así como el cruce fronterizo más importante con Irak, informa Reuters, citando fuentes familiarizadas con el asunto.
Según la agencia, la alianza conocida como Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyada por EE.UU., ahora tiene el control total de la ciudad.
Por su parte, el mando de las FDS confirmó en un comunicado citado por el canal iraquí Rudaw la toma de la ciudad y de la parte occidental de la provincia homónima, así como que la decisión se tomó después de que las fuerzas sirias se retiraran de esa zona.
El 3 de diciembre, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, denunció en una reunión del Consejo de Seguridad la huella de la inteligencia ucraniana en Siria.
«Nos gustaría llamar especialmente la atención sobre el rastro de la Dirección Principal de Inteligencia de Ucrania en la organización de actividades de combate y de suministro de armas a milicianos que operan en el noroeste de la República Árabe Siria», afirmó el alto diplomático. Asimismo, indicó que, según la información disponible, son EE.UU. y sus aliados quienes, en mayor o menor medida, prestan apoyo a los yihadistas.
En este contexto, Nebenzia reiteró que en la provincia siria de Idlib hay instructores militares ucranianos del personal de la Inteligencia del país eslavo que han preparado a terroristas para los combates. «Los terroristas ucranianos y sirios, movidos por el odio a Rusia y a Siria, están cooperando, tanto para reclutar combatientes para las Fuerzas Armadas ucranianas como para llevar a cabo ataques contra los militares rusos y sirios en Siria», dijo.
Anteriormente, el medio ucraniano Kyiv Post reportó que algunos grupos islamistas que atacaron la provincia septentrional siria de Alepo recibieron entrenamiento de una unidad de las Fuerzas Especiales del servicio de inteligencia militar ucraniano.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha exigido a Ucrania que deje de apoyar a las milicias sirias y ponga fin a los envíos de armas. Según el jefe de la Dirección de Asuntos Euroasiáticos de la Cancillería iraní, Mojtaba Demirchilu, citado por IRNA, «estas acciones suponen una clara violación de las obligaciones internacionales de los Estados en materia de prevención y lucha contra el terrorismo».
El nuevo líder de Hezbolá, Naim Qassem, declaró el 5 de diciembre que el movimiento de resistencia libanés seguirá apoyando a Siria.
Asimismo, denunció que la actual agresión contra el Gobierno de Bashar al Assad «está patrocinada por Estados Unidos e Israel». «Los grupos takfirís siempre han sido sus herramientas desde 2011, cuando comenzó la crisis en Siria», indicó, en referencia a los seguidores de la doctrina ultrarradical islamista takfir, de orientación sunní, con la que los terroristas de Al Qaeda justificaban las matanzas de musulmanes.
«Amenaza a la estabilidad de toda la región»
Al término de una reunión tripartita en Bagdad, los ministros de Exteriores de Irán, Irak y Siria emitieron este viernes una declaración conjunta en la que acentúan la importancia de preservar la soberanía y la independencia de Siria, al tiempo que muestran su apoyo al gobierno y a la nación sirios en su lucha contra los terroristas takfirís.
Los cancilleres indican que la amenaza a la seguridad de Siria «es una amenaza a la estabilidad de toda la región», por lo que es indispensable la coordinación y la cooperación, así como las continuas consultas diplomáticas entre los países para sacar a la región de las consecuencias de esas tensiones, reporta IRNA.
Impacto de la escalada
Stephane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, evaluó en al menos 370.000 la cantidad de personas que se han visto desplazadas por los combates en Siria desde el 27 de noviembre.
«Desde la escalada de las hostilidades, al menos 370.000 hombres, mujeres y menores de edad, niños y niñas, han sido desplazados, incluidos 100.000 que abandonaron sus hogares más de una vez. La mayoría de los desplazados son mujeres y niños», precisó, citado por AFP.
PUBLICADO EL 06 DE DICIEMBRE DE 2024 Con información de Ghaith Alsayed / AP)